LA PRÓRROGA: UN AÑO MÁS DE BASURA
Por Luis Picazo Montoto - Aficionado de España
[ 10/08/2009 ]
Está en el recuerdo de cualquier aficionado de Las Ventas que las adjudicaciones de la Plaza de Toros de Madrid en los dos últimos Concursos celebrados, fueron sublimes pucherazos y, según las malas lenguas, auspiciados por la Presidenta de la Comunidad de Madrid (en lo sucesivo CAM), Doña Esperanza Aguirre Gil de Biedma debido a presuntas relaciones inmobiliarias de su esposo Don Fernando Ramírez de Haro y Valdés, Conde de Murillo, con los adjudicatarios que se presentaron al primer Concurso, en el 2004, con el nombre de Tauro Ventas S.A. (aunque luego pasaría a llamarse Taurovent y después Tauropedo por la Afición) y al segundo, en el 2006, con el de Taurodelta y, posterior y vulgarmente, Tauromierda.
En el primero, la Operación Malaya, al dar con los huesos en la cárcel de Fidel San Román, Gerente de la empresa, truncó las aspiraciones de la CAM de prorrogar la gestión de la plaza, por lo que tuvo que recurrir al Concurso del 2006 para seguir favoreciendo al Clan de los Choperitas a pesar de todos los incumplimientos del Contrato anterior.
El pasado año, el deseo expreso de la citada Presidenta de contratación de José Tomás dos tardes, imposición que la empresa aceptó in extremis, se agradeció el 10 de Julio con la prórroga prevista de un año aunque todavía faltaban tres meses de programación, entre los cuales estaba la feria de Otoño. A pesar de esto, y de la mala temporada desarrollada, las protestas fueron muy escasas por parte de la Afición y creo que nulas en la prensa.
Con estos antecedentes nadie debe sorprenderse de como ha ido, y va, la presente temporada. El primer aviso a navegantes fue la salida de los carteles de la feria de San Isidro y la fraudulenta del plurianiversario, por cierto, aprobados sin un solo voto en contra por el Consejo de Asuntos Taurinos de la CAM (en lo sucesivo CAT, Cuento de Arreglos Taurinos, le llama muy acertadamente el amigo Acuña). Las protestas por la malísima calidad de los mismos, incrementada por la ausencia de cuatro toreros y un rejoneador, también fueron unánimes y, sorprendentemente y por primera vez, coincidentes las de la Afición y la prensa.
Resonando todavía los ecos de esas protestas se celebró el que sin duda ha sido el peor serial de toda la historia del coso, opinión que, de nuevo con sorpresa, han compartido Afición, público en general y críticos poco o nada sospechosos, con los periodistas sobrecogedores y medios de comunicación al servicio del taurineo.De poco, más bien de nada, ha servido el reconocimiento público y unánime de verdadero bodrio que ha sido el serial, ni tampoco la basura en que el clan Choperita está convirtiendo la temporada actual con el beneplácito del CAT y su nefasto Gerente, Don José Pedro Gómez Ballesteros.
Llegó la hora de que Taurodelta solicitara la nueva prórroga y así lo hizo y … ¡oh sorpresa!, el 8 de Julio, también con tres meses todavía pendientes de programar y contra todo pronóstico, le fue concedida, aunque en esta ocasión, caso insólito, de forma mayoritaria y no por unanimidad … ¡vamos mejorando! … y más aún si el CAT hiciese público el nombre de los consejeros disidentes, pero ¿sería pedir demasiado?.
Prórroga concedida, un año más de basura y la pregunta es inevitable ¿quiénes son los culpables de que semejante despropósito se haya producido?.
En primer lugar el ya nombrado nefasto Gerente del CAT, Don José Pedro Gómez Ballesteros y el resto de Consejeros que le apoyan, por su colaboracionismo con la empresa; en segundo lugar los periodistas y medios de comunicación, los honestos por su pasividad y silencio y, los vendidos, desgraciadamente mayoría, por seguir mamando de la ubre; después los profesionales del toro que les va muy bien con el actual estatus de menos riesgo y menos verdad, versus más pasta y más fraude; a continuación la Autoridad que consiente todo y no respeta lo más mínimo el Reglamento ni defiende los derechos del público; siguen las asociaciones taurinas y los que taurinean que, por lo que luego comentaremos, merecen comentario aparte; por último los aficionados y público en general que tragan lo que les echen a pesar de que pasan por taquilla con dinero de curso legal.
Decimos que las asociaciones taurinas y los taurineadores merecen comentario aparte y lo vamos a justificar, pues consciente o inconscientemente colaboran con la empresa.
Cuando desembarcó el clan en Madrid, lo primero que hizo el Choperita, listo él, fue invitar a las principales asociaciones de aficionados de Madrid y a algún presunto aficionado, pero taurineador a la postre, a reunirse con él para que colaborasen en la preparación de la temporada y todos, la mayoría con su mejor intención, no dudaron en acudir a la reunión propuesta. Los resultados fueron desastrosos: una temporada peor que todas las anteriores programadas y los celebres 107 incumplimientos. ¿Qué hicieron los invitados?: unos nada, algunas asociaciones escribieron una carta de protesta y ahí quedó todo, pero … al año siguiente, allí estaban de nuevo reunidos con el clan y … ¡más de lo mismo!. Y así un año y otro y otro, hasta el presente que repitieron ¡cómo no! los pasados 25 y 26 de febrero. Y mientras tanto la empresa presumiendo de atender los deseos de los aficionados y de contar con su colaboración en la planificación de la temporada y en la preparación de los carteles …
Puedo entender, y entiendo, que la primera vez les engañasen en su buena fe, e incluso la segunda, pero … ¿tantas?. No, no les han engañado, pero ha podido más que ellos su afán de protagonismo, de salir en la foto. Y esto, que tiene un nombre, TAURINEAR, es uno de los mayores cánceres de la Fiesta.
Quiero, hacer un inciso para, en honor a la verdad y según mi criterio, referirme a una excepción: la Asociación EL TORO de Madrid, que, en diversas ocasiones, ha mostrado públicamente su discrepancia.Según tengo entendido, en la última reunión con el Choperita salió un contestatario que le cantó las cuarenta: el Presidente de dicha Asociación, Don Faustino Herranz González, más conocido por “El Rosco”. Anualmente, esta Asociación, aunque caiga en saco roto puesto que los responsables de la gestión de Las Ventas no la tienen en cuenta, edita una “Lista Negra de Ganaderías” en la que recomienda las que no deberían venir a Madrid por sus continuos fracasos. Podrá estarse o no de acuerdo con algunas ganaderías de la misma, pero la realidad es que, muy claramente, expone las razones de su exclusión, o de su readmisión.
Siguiendo con esta asociación, en el presente año ha enviado, entre otras y que yo sepa, las siguientes cartas:
- El 18 de Febrero a la Delegación del Gobierno y a la Jefatura Superior de Policía, ambas de Madrid, pidiendo el cese de Don Trinidad López-Pastor Expósito y de Don Julio Martínez Moreno, como Presidentes de la plaza de toros de Las Ventas, por sus pésimas actuaciones y nula defensa de la integridad de la Fiesta y los derechos del público.
- El 6 de Abril al CAT mostrando su indignación por los carteles de San Isidro y acusándolos de cómplices por aprobarlos.
- El 22 de Junio al ¿nefasto? ¿inoperante? Director-Gerente del CAT, Don José Pedro Gómez Ballesteros, con copia a la Presidenta de la CAM, Doña Esperanza Aguirre Gil de Biedma, para que no siguiese la empresa TAURODELTA al frente de la plaza de Las Ventas.
Por último, en sus boletines, “LA VOZ DE LA AFICIÓN”, nunca falta la crítica, siempre razonada, a todo lo relacionado con la degeneración de la Fiesta en Las Ventas -y, por ende, en el mundo entero- auspiciada por la actual empresa con la complicidad del CAT y su Gerente al frente. Como ejemplos, recordemos a este respecto el Boletín nº 29, monográfico y extraordinario, dedicado en exclusiva al “Pucherazo” del último concurso y pidiendo, exigiendo, la dimisión de los artífices del mismo: Don Ignacio González, Vicepresidente de la CAM y Presidente de su CAT, Don Pedro Antonio Martín Marín, Vicepresidente del CAT y, el tantas veces citado, Don José Pedro Gómez Ballesteros, Director Gerente del CAT; y el nº 34 a cuya portada merece la pena echar un vistazo: sobre el fondo de una fotografía del 7 llena de pancartas, un cartel de “FUERA ESTA EMPRESA” y debajo un recuadro con la foto del Choperita flanqueado por su hijo y el Gerente del CAT con el letrero de “CULPABLES Y COMPLICES”.
La Presidenta de la CAM, Dª Esperanza Aguirre Gil de Biedma, última y máxima responsable, siempre ha ignorado estas cartas y Boletines y nunca, nunca, a pesar de que presume de aficionada, ha tomado cartas en el asunto y de ahí que todo haya ido de mal en peor.
Tras este inciso, necesario para no meter a todas las asociaciones en el mismo saco, volvamos al taurineo.
En la corrida concurso de ganaderías del pasado 19 de Abril, formaron parte de su jurado nada más y nada menos que cuatro Presidentes de las asociaciones que habitualmente acuden a las reuniones con el Choperita y en el jurado que otorga los premios de Taurodelta a los ¿triunfadores? de San Isidro, repetían tres de los anteriores y también había un cuarto Presidente de otra de las asociaciones ¿afines? al proceder de la nefasta empresa. (Por cierto, en ninguno de estos jurados aparece el Presidente ni ningún representante de la Asociación EL TORO de Madrid ¿casualidad? ¡no! ¡dignidad y vergüenza!)
Bien, esto de asistir a reuniones, figurar en jurados, no publicar escritos de denuncia y algunos etcs. más que podríamos añadir ¿creen ustedes que es colaborar con la empresa y en consecuencia con el CAT que dice amén a todo lo que ésta haga y deshaga? o, por el contrario, ¿piensan que es oponerse y luchar para echar a ambos?. Yo, desde luego, lo tengo muy claro y crean que lo lamento, pues, en mi opinión, son precisamente las asociaciones de aficionados las que de alguna manera podían luchar por dignificar la primera plaza del mundo. Y casi ninguna lo hace.
Cualquier aficionado sabe, o debiera saber, lo que Taurodelta y el actual CAT están haciendo de Las Ventas y tendría que poner el parche antes de la herida, pero no sirve de nada lamentarse a toro pasado como han hecho aficionados taurineadores, periodistas corruptos y asociaciones colaboradoras. Todas las quejas y lamentos lo han sido cuando ya no había solución, y todas las asociaciones que han sido invitadas, todas, han acudido a la llamada de EL ALBERO para salir en la foto quejándose de la concesión de la prórroga, pero, salvo la excepción antes citada de la Asociación EL TORO de Madrid ¿cuántas se han anticipado a solicitar que no se concediese la prórroga?. Yo no sé de ninguna, pero sí sé de una, de ámbito nacional y con sede en provincias, que ha emitido, por supuesto a posteriori ¡faltaría más!, un comunicado reiterando el cambio de sistema de gestión -en lo cual estoy de acuerdo- y solicitando a la Presidenta de la CAM “que constituya una MESA DE DIÁLOGO TAURINO con la participación , entre otros sectores implicados , de las asociaciones de abonados y aficionados más representativas, para analizar y evaluar los distintos sistemas de gestión y proponer para Madrid el más idóneo para la consecución de los objetivos antes expresados”. A eso lo llamo yo, como diría un castizo: querer estar en la pomada.
Y vuelvo al tema para preguntarme: ¿cuántas asociaciones han acudido en alguna ocasión a un Juzgado para presentar una denuncia no sólo por los continuos incumplimientos de Taurodelta, sino también por los constantes fraudes que se cometen en los festejos?. Que yo sepa ¡ninguna! … ¿es que lo desconocen?, pues no lo entiendo, deben ser muy ignorantes porque es “vox populi”. Todavía no hace mucho se denunciaban algunos en esta misma tribuna en dos interesantes artículos que todos ellos deberían leer: “Y DE LAS DROGAS QUÉ?” y “QUÉ PASA CON EL AFEITADO”.
Los aficionados, de forma individual, no podemos permitirnos poner denuncias, no tenemos peso alguno, hace falta cierta experiencia en la forma de hacerlo, cuesta tiempo, dinero etc. pero esos colectivos que presumen de defender la Fiesta sí están en condiciones de hacerlo: representan a un colectivo lo que les da peso, algunos incluso cuentan entre sus filas (y presidencia) con prestigiosos letrados, disponen de dinero … ¿por qué no lo hacen? ¿no sería mejor emplear en ello parte del dinero de las subvenciones que reciben de la CAM en lugar de gastarlo en cuchipandas, agasajos, premios y visitas a ganaderías, algunas de dudosa reputación?.
Recientemente me llamó la atención un comentario de Francisco Díaz sobre el primero de los artículos antes citados. Decía: “Estamos en la edad de oro de la química en el toreo. Y en la edad de oro de la desvergüenza informativa taurina”. Yo me permitiría añadir: “Y de la inoperancia de las Asociaciones taurinas” y termino, más o menos, como lo hacía recientemente también aquí, la aficionada María García en “CULPABLES SOMOS TODOS”: Las Asociaciones seguirán sin mojarse y al año que viene se repetirá la historia, pero yo al escribir esto al menos me he quedado satisfecho.
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