
La obra representa la ejecución de patriotas por las tropas francesas. Goya nos muestra una escena nocturna, donde tenemos un potente foco de luz dentro del cuadro: un gran farol colocado en el suelo que enfoca directamente a los cadáveres y a los prisioneros que están a punto de ser fusilados. Tenemos la obra dividida como en dos partes, a la derecha el pelotón francés, del que solo vemos las espaldas y las armas, y en el lado derecho tenemos al bando español, que espera ser ajusticiado.
El grupo de civiles que va a ser fusilado en el cuadro de Los fusilamientos, podríamos agruparlos en tres momentos: pasado, presente y futuro; los que ya han sido fusilados, los q

En el grupo de patriotas hay un hombre arrodillado que sobresale del resto, con una camisa blanca que nos da también una gran luminosidad al cuadro. La figura es extraordinaria, Goya nos pone a este hombre, muy iluminado, tanto por la luz que le da el foco como por la indumentaria que lleva, y hace que nuestra mirada se centre en él. En el rostro de este hombre vemos reflejado el horror, el miedo, la tristeza, la desesperación, y la súplica. Es, desde mi punto de vista, una de las figuras más logradas y con más transmisión de sentimientos al espectador de toda la pintura de Goya.
Este hombre ha sido comparado muchas veces con otra obra de Goya:


Esta si me parece una gran obra maestra del aragonés. Nada más que decir.
3 comentarios:
Según tengo entendido la sangre que aparece en el suelo fué pintada directamente con las manos por el maestro.
Oselito.
No se si habrás visto el número de abril de "Descubrir el Arte", hay un interesante artículo sobre la restauración de las dos obras de Goya. Imprescindible.
Antonio, pues no, no he visto el artículo. No tengo tiempo para nada. Si que se que se han restaurado estos dos cuadros y alguno más con motivo de la exposición, pero no he seguido con detenimiento los procesos de restauración.
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